En pocos años nos tocará poner en práctica lo aprendido,
poner nuestra mayor voluntad para transferir nuestros conocimientos y las ganas
que tenemos de que alguien sepa hacer, sepa ser, sepa transferir o simplemente
sepa todo aquello que queremos enseñar.
Cuando lo consigamos, nuestra actitud será más confortable y
nos en sentiremos paz con nosotros mismo
al saber que lo estamos haciendo bien.
Sin embargo, para que esto lo llevemos a la práctica, es
importante conocer bien su teoría. Es decir, saber en lo que nos apoyamos a la
hora de enseñar.
Algunos autores piensan que, los grandes modelos de E-A se
han dado a lo largo de la historia con dos características, isomórfica (igual estructura)
y unívocamente (mismo
significado).
Se habla de dos grandes paradigmas:
1.Cuantitativo: también llamado Tradicional, Técnico o
Positivista.
Este modelo cobra peso en el siglo XX y
está presente hasta los años 80 aproximadamente.
Se centra en lo que se percibe por los
sentidos, lo cuantificable, traducido a la estadística y dejando de lado la
razón u opinión de otros autores. Por esto, el modelo adquiere este nombre.
Aquí, lo importante es saber bien lo que el
profesor enseña y no el propio aprendizaje del sujeto. Así se llega más
rápidamente a un grupo homogéneo, sin posiciones individualistas.
Es importante la planificación, el control,
el orden y la autoridad.
Este
sistema ha experimentado varias críticas ya que no será el más adecuado para
todos los casos de E-A .Además de que la ciencia va mas allá que el simple
conocimiento.La objetividad no existe, y por último, el
control y la predicción son imposibles en lo pedagógico ya que sería caótico.
2. Cualitativo: también llamado Conceptual, Constructivista o
interpretativo.
Cuando cae
el sistema cuantitativo sobre los años 80, aparece este en EE.UU. ,
Inglaterra y Europa. España, crítico este paradigma por ser un proceso lento y
actualmente está presente la crítica.
Respondiendo
a esta crítica, algunos autores afirman que este sistema es más “lento” debido
a su mayor complejidad, (M.A. Santos Guerra, 1996-1999).
En este,
los valores cuantificables del sistema cualitativo se pierden y se remodelan adaptando
el nuevo método de enseñanza a cada sujeto.
Las ciencias
Naturales lo apoyan, ya que para poder confiar en este, se puede llevar a la práctica
por más de un individuo.
Además, con
el sistema cualitativo, el profesor se involucra mayormente en la motivación del
alumno, así el aprendizaje aumenta no por obligación, sino por satisfacción.
Tampoco podemos
afirmar que este paradigma sea el verdadero o el más valido, simplemente es otro sistema hacia el que nos
podemos inclinar.
Sin embargo,
la mezcla de ambos paradigmas hace nacer un tercero con igual peso:
3.El paradigma mixto o sociocritico:
nació tras la II Guerra Mundial en Alemania.
Tal y como
afirmó R. Young (1993), este paradigma
se “trata de mostrar como la
escolaridad puede ser educativa en el sentido más pleno; fomentando la
capacidad de resolver problemas de los dicentes de forma evolutiva”.
Además, se
intenta encontrar la relación entre educación
con la enseñanza y a su vez con la sociedad, siendo esta última la que en realidad
nos enseña.
Se vincula la teoría y la práctica, aquí ya
se incluye la opinión e intenta solucionar las diferencias de sexo, razas o
clases sociales, intentando así una mayor justicia.
Con esto, la ideología de cada sujeto y su educación se podrá expandir.
Este sistema critica al cuantitativo
afirmando que es fuertemente técnico y
no tiene en cuenta la opinión de los demás. En el cualitativo se centra en que
no deja ver la realidad tal y como es sin condición alguna.
En los años 80 nace la PERSPECTIVA POSTMODERNA en las
zonas más desarrolladas.
Esta, se basa en los fenómenos sociales
que se dan en la actualidad, es decir, se entenderá cuando el sujeto observe la
condición social contemporánea. Como por ejemplo, la Globalización, la cual es
el mayor fenómeno que se observa y el que trae consigo grandes cambios.
También diferencia entre
Postmodernidad y Postmodernismo.
Confía en sistemas de E-A más diversificados,
atendiendo a los sujetos.
Esto, hace que tenga un gran impacto sobre las escuelas,
en la educación y en los profesores. Se abre a la complejidad y a las
conexiones basadas en la percepción descriptiva de la realidad.
Sin embargo, todo está
esquematizado, se crea una insatisfacción generalizada por parte de los
docentes que se traduce a un fracaso educativo. También se da el Etnocentrismo.
Los sujetos no buscan ya la explicación
de los sucesos, simplemente actúan.
A modo de conclusión, puedo decir que, bajo mi juicio
ninguno de los paradigmas es mas verdadero que otro, ni más eficaz. Del paradigma
cuantitativo me asombra su rigidez, pero veo bien que se utilice en algunos
casos. P.ej, clase de matemáticas.
Sin embargo, en otros contextos, no es justo que la persona
no pueda dar su opinión, ya que como contrario a este sistema creo que el
individualismo es la esencia del grupo y lo que hace posible el avance.
Por otro lado, el paradigma cualitativo, para mí, es algo “blando”,
y como opinaba mi compañero de clase, hace débiles a las personas, ya que nunca
se les propone una meta difícil de superar. Aunque es bastante “humanista” y “ayuda”
a los que tienen mayor dificultad en el aprendizaje.
Del sistema mixto, me alerta la importancia del contexto en
el que se encuentra y la relación entre educación, enseñanza y sociedad. Ya que,
para mí, cada una transmite unos valores diferentes y en igualdad de
importancia.
Tengo que decir que, aunque ninguno se haya dado puramente
en la realidad, yo como persona, creo que utilizaría el que viera más
conveniente en cada situación.
Por ultimo, decir que, de cada gran paradigma nace diferentes modelos de diseños curricular, los cuales se analizaran posteriormente.